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FIBROMIALGIA Y CANNABIS

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La Fibromialgia es una patología caracterizada por presencia de dolor crónico musculoesquelético generalizado. Los pacientes con Fibromialgia presentan además alteraciones del estado de ánimo y del sueño. Son también síntomas frecuentes la rigidez muscular matutina, falta de atención y cefalea. Es de origen desconocido, aunque es probable que haya un componente genético y se cree que está relacionada con una alteración a nivel del sistema nervioso central. 

Ya que la Fibromialgia no se manifiesta con síntomas físicos evidentes, ha sido tradicionalmente infradiagnosticada y con frecuencia se ha considerado de origen psicosomático. Un punto de inflexión en el tratamiento de esta enfermedad fue la publicación de los Criterios de Clasificación de la Fibromialgia por parte del American College of Rheumatology (ACR) en 1990, los cuales han permitido una definición más precisa de la patología y una mejora de su diagnóstico. La Fibromialgia es la causa más frecuente de dolor crónico musculoesquelético generalizado. Su prevalencia en España ronda el 2,4% de la población adulta. Es mucho más frecuente en mujeres (6 veces más) y suele presentarse entre los 35-55 años de edad. No disminuye la esperanza de vida, pero provoca un gran impacto en la calidad de vida del paciente. 

¿Cómo puede ayudar el Cannabis en la Fibromialgia? 

La Fibromialgia es una patología compleja y por tanto, también su tratamiento. El abordaje terapéutico consiste en minimizar los síntomas y mejorar el estado de salud general del paciente. Cada paciente es único y por tanto, el tratamiento debe ser individualizado, con un enfoque integrativo y multidisciplinar, que incluya el manejo del estrés y la ansiedad. Debido a que la Fibromialgia tiene un gran componente psicológico además de físico, el cannabis puede ayudar a mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes que la padecen, ya que actúa a estos dos niveles: 

  • Disminución del dolor físico, debido a las propiedades antiinflamatorias y analgésicas de los cannabinoides, que intervienen modulando la percepción dolorosa. 
  • Mejora del bienestar emocional, estado de ánimo y calidad del sueño, gracias a las propiedades ansiolíticas/hipnóticas de ciertos cannabinoides (THC, CBD, CBG) y otros componentes de la planta como terpenos (mirceno, limoneno, linalool...). 
     

La evidencia científica sobre la efectividad del cannabis en el tratamiento de la Fibromialgia es contundente: 

Una encuesta a 1300 pacientes de fibromialgia, llevada a cabo por la National Pain Foundation y la National Pain Report de Norteamérica, reveló que un 62% encontró el cannabis muy eficaz para sus síntomas, frente a los medicamentos aprobados por la FDA (Food and Drug Administration) duloxetina, pregabalina y milnacipran (8%, 10% y 10% de eficacia reportada contra los síntomas, respectivamente). Por tanto, la eficacia del cannabis en el tratamiento de esta patología parece ser significativamente mayor que la de los otros medicamentos tradicionalmente usados por la población... 

Y sin irnos tan lejos, aquí en España se llevó a cabo un estudio clínico en el Hospital del Mar (Barcelona), con 56 pacientes de Fibromialgia para investigar los efectos del cannabis en los síntomas y calidad de vida. La mitad de los pacientes consumía cannabis y la otra mitad no. Los consumidores de cannabis reportaron una reducción del dolor y la rigidez muscular, además de una mejora en la relajación y bienestar. Los investigadores afirmaron, por tanto, que el cannabis se asocia a efectos beneficiosos sobre algunos síntomas de la fibromialgia y que son necesarios más estudios para dilucidar la implicación del sistema cannabinoide en la fisiopatología de la enfermedad, y precisar la utilidad de los cannabinoides como agentes terapéuticos. 

Contexto legal vs realidad.

Sin embargo, siendo realistas, la actual situación legal del cannabis y sus derivados en España, o sea la no regulación del cannabis, no favorece para nada que se lleven a cabo estudios clínicos rigurosos de calidad, ya que implican un largo y tedioso proceso burocrático... 

Mientras tanto estamos perdiendo datos muy valiosos, que serían de utilidad por ejemplo para estudios observacionales ...Porque como sabemos, la gente consume cannabis, aunque los políticos no quieran verlo (por algo será) ...Y así lo dicen los datos: según el estudio EDADES 2022 del Plan Nacional sobre Drogas, un 40,9% de la población española ha consumido cannabis en su vida y un 8,6 % de la población lo ha consumido en los últimos 30 días. 

Pero mientras se generan más “papers” sobre los efectos terapéuticos del cannabis, los pacientes no pueden esperar y como es lógico, buscan aliviar sus dolencias...Al igual que yo en su día, busqué ayuda para mi hermana, cualquier cosa que pudiera mejorar su sintomatología. Y descubrí el potencial del Cannabis Medicinal (sí, en mayúsculas). Y esto cambió todo. Tras mucho leer e informarme sobre el tema, recibí formación para profesionales sanitarios, tras la cual empecé a asesorar a pacientes para un uso seguro del cannabis en diferentes patologías. Han pasado casi 8 años y no ha sido un camino fácil... Y seguimos a la espera de la regulación. Pero hoy me quedo con lo positivo: el aprendizaje y la oportunidad de cambio. Cuando veo la mejora en la calidad de vida de los pacientes y recibo sus agradecimientos, me digo a mí misma que estoy haciendo algo bien y me animo a seguir adelante. Y no son casos aislados (o anecdóticos como dice la ciencia): son la mayoría. Creo firmemente que el paciente es quien decide en su proceso y que los profesionales sanitarios debemos informar/asesorar sobre las diferentes posibilidades terapéuticas y promover una actitud proactiva en el proceso de enfermedad.  


Entonces, en la práctica, ¿qué debo saber y qué puedo hacer? 

Infórmate. Recurre a fuentes de información fiables. Como paciente, tienes derecho a elegir libremente sobre el tratamiento para tu patología. El cannabidiol (CBD) se puede comprar libremente en la UE en diversas presentaciones (es el componente no psicoactivo del cannabis).  El cultivo de cannabis y consumo propio es legal en un espacio privado. Por ello, existen asociaciones de usuarios de cannabis, donde pueden orientarte.  

No obstante, para evitar efectos secundarios y valorar posibles interacciones, es recomendable buscar asesoramiento personalizado por parte de un profesional de la salud experto en Cannabis Medicinal. Además, cada paciente es único: existe mucha variabilidad individual en cuanto a dosis terapéutica. Por tanto, ten mucha precaución antes de automedicarte, especialmente si es la primera vez que consumes cannabis o eres persona vulnerable: anciano, embarazada, o paciente con patología psiquiátrica o cardíaca. 

Evita fumar cannabis. No es la vía de administración recomendada para fines terapéuticos, ya que en la combustión se producen tóxicos cancerígenos. Existen otras vías de administración más adecuadas y efectivas, como la vía inhalada o la sublingual, con diferentes tiempos de acción. 

Por último, asegúrate de que los preparados derivados de cannabis son de calidad, de composición conocida, libres de pesticidas y otros tóxicos. Debido a la situación de vacío legal en la que se encuentra el cannabis, algunos productos del mercado presentan un etiquetado "engañoso". 


Ana M. Rodríguez Sáez 
Farmacéutica. Dietista.  
Nº 1416 ASNADI. MedicanMap 
Colaboradora de AFINA (Asoc. Fibromialgia Dos Hermanas, Sevilla)